No creas que te olvidé, siempre estarás en mi corazón, mi adorada Sammy, allí tienes un lugar muy especial que nadie mas lo ocupará.
Todavía me duele salir y que no vengas a recibirme como solías hacerlo, cada día siento el gran vacío que dejaste, aunque eras tan chiquita
Y no falta el rato en que se me viene a la mente la imagen de tu carita tan hermosa, tus ojitos tan tiernos y tu hermoso pelaje rubio, y no puedo evitar sonreir, aunque a los pocos segundos me invada esa otra imagen horrible de ver tu cuerpito inmóvil, y es entonces que mis ojos se llenan de lágrimas...
Sí mi enana, hay días en los que todavía lloro por tí, por tu partida, pero ahora me escondo para hacerlo, para evitar las incómodas preguntas de las personas... Lloro en mi soledad porque creo que los demás no entenderán la falta que me haces... por eso trato de hacerme la fuerte...
Espero que no olvides que aquí tienes una familia que te adora, asi que... cuídanos desde donde estés, Sammy, cuida nuestro hogar como siempre lo hiciste, y nunca olvides que te adoro mi demonio rubio
No hay comentarios:
Publicar un comentario