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lunes, 9 de mayo de 2016

Esas pataditas que me das

Sigues y sigues creciendo, mi querida bebé
ya falta poco para tenerte en mis brazos
y hasta que ese día llegue, no podría disfrutar más de tenerte viviendo en mí
sentir cómo te mueves, cómo te acomodas, cómo pateas, 
cómo tienes hipo y cómo sientes 
Es una conexión nuestra, nuestro secreto, 
saber cuándo te sientes feliz, cuándo estás renegando, 
cuándo te avergüenzas, cuándo te sientes traviesa, 
cuándo tienes hambre y cuándo tienes sed...
A veces me lastimas con tanto que te mueves
pero es un dolor causado con amor
ese dolor con el que puedo ser masoquista solo por saber que estás bien dentro mío.
Y a veces haces revolución, mueves toda mi pancita
como con un bailecito alegre que tienes,
llenando mis días de alegría a más no poder
Me haces muy feliz, mi bebé
es incomparable ese vínculo que ya siento contigo, 
incluso desde antes de que nazcas. 
Tal vez todo empezó la primera vez que te sentí dentro mío
como un latido suave que no era el mío 
al cuarto mes de tu vida
y aunque me dijeron que no podías ser tú porque eras aún muy chiquitita, 
ese acontecimiento fue lo que marcó verdaderamente mi ruptura epistemológica
el cambio existencial en todo mi ser 
porque ese momento siempre marcará un antes y un después, mi preciosa
Eres lo que cambió mi vida, y la sigue cambiando continuamente
porque cada día descubro algo de ti y de mí,
cada día reconozco nuevas sensaciones y emociones mías que tú desbordas
Es cierto, admito que tengo miedo por lo que se viene
pero... no todo será desconocido, yo ya te conozco desde hace unos meses
y sé que serás mi cómplice después de todo
Te amo muchísimo mi bebé hermosa


   


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