Hoy sería tu cumpleaños...

Al rezar anoche, envuelta entre la oscuridad y entre mis frazadas,
tuve esas ganas indescriptibles de una sonrisa tuya...
cerré los ojos y pedí a Dios que te deje visitarme,
quería verte de nuevo, aunque sea en sueños...

Y fue anoche que Dios cumplió mi deseo de soñar contigo
y entre nebulosas propias de los sueños,
entre ciertas incongruencias que crea la mente al momento de dormir
pude verte de nuevo...
pude abrazarte fuertemente, te juro que te sentí entre mis brazos
vi tu cara tal como la recuerdo, cuando aún no habías enfermado
y en el sueño sabía que era algo extraordinario volver a verte,
sabía que ya habías partido
pero que por alguna razón Dios me estaba dando el privilegio de abrazarte de nuevo...

Poco duro el sueño, solo logré abrazarte y expresar mi dicha al hacerlo
solo pude tomarte entre mis brazos con todas mis fuerzas
tal vez te abracé demasiado fuerte, porque poco a poco fui despertando
y tu te fuiste desvaneciendo...

Me gusta pensar que Dios escuchó mi oración anoche
y que te dejó visitarme en mis sueños
me gusta pensar que en serio estuviste aquí
y que pude abrazarte en otra dimensión que alcancé de dormida
Me gusta pensar que la sonrisa que vi anoche fue la sonrisa que tienes ahora cuando me observas desde allá...
Me gusta pensar que sabes cuánto lamento todo lo malo...
y que desde allá me ayudaste para que pueda recibir la buena noticia que recibí hoy

Y mientras se mezclan en mi corazón la alegría y la melancolía,
espero que Dios me vuelva a conceder el privilegio de poder ver tu sonrisa de nuevo