Es la primera vez que te escribo,
debo admitir que desde niña te tuve miedo...
A mis 9 años me preguntaban cuál era mi mayor miedo y yo contestaba: "la soledad"
y esa respuesta se prolongó, posiblemente hasta los días más próximos
Pero últimamente me doy cuenta que siempre me has estado acompañando,
que a lo largo de mi vida, siempre estuviste conmigo,
unas veces más presente que otras,
abrazándome con esos fríos brazos que tienes
y me doy cuenta que tu presencia es la única que siempre me acompañará,
hasta el momento de mi muerte.
No fue necesario un gran acto para darme cuenta de ello
fue algo tan simple como la palabra que desencadena al psicótico,
así de simple e insignificante, pero de gran peso subjetivo...
Hay momentos en los que saboreo tu compañía,
hay otros en los que trato de huir de ti, pero eventualmente vuelves,
con esa sonrisa sincera, que a veces exaspera y otras saca lágrimas
Sin embargo hoy te quiero agradecer,
porque es gracias en ti que las ideas más hermosas surgen
gracias a ti puedo apreciar a las personas que están lejos
gracias a ti se puede disfrutar mejor de la música, sin restricciones
gracias a ti los personajes de los libros cobran realidad
gracias a ti surgen reflexiones profundas
gracias a ti puedo llorar sinceramente si es que tengo ganas de hacerlo
y es gracias a ti también que me doy cuenta de quién volverá y quién no volverá
a hacerte compañía mientras tú me haces compañía, paradójicamente...
IMAGEN : sunset's lonelyness by Moonswatcher
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